Última modificación 11/03/2025 01:50:38

Por esta razón la juventud necesita saber de educación sexual

Por: Mayra Dávila

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La educación sexual es una herramienta que permite a los y las jóvenes tomar decisiones informadas para proteger su salud, construir relaciones sanas y respetuosas. Sin embargo, aún en este tiempo, la educación sexual sigue siendo tabú para muchos, ya que se mira desde el morbo en vez de mirarse desde la responsabilidad y protección. ¿Por qué es importante que la juventud conozca sobre su sexualidad? Aquí te contamos.

En temas de salud ayuda a prevenir embarazos no deseados y enfermedades de transmisión sexual (ETS). Por lo que es de suma importancia conocer los métodos anticonceptivos (condón, pastillas anticonceptivas, DIU, etc) más efectivos o que mejor se adecuen a su estilo de vida y economía. 

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Conocer su cuerpo y su salud reproductiva les permite tomar decisiones más informadas y responsables, de modo que puedan decidir cuándo iniciar su vida sexual, basado en el deseo y el consentimiento, y no en la presión social. Del mismo modo, este conocimiento permite saber las señales de alerta de abuso sexual, y conocer en dónde buscar ayuda en caso de encontrarse ante una situación de riesgo. 

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De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud: “Mediante programas de educación sexual bien diseñados y bien impartidos se apoya la toma de decisiones positivas en torno a la salud sexual. Se ha demostrado que los jóvenes tienen más probabilidades de iniciar la actividad sexual más tarde, y cuando tienen relaciones sexuales hacerlo de forma más segura, si están mejor informados sobre la sexualidad, las relaciones sexuales y sus derechos.”

A inicios de año, dos jóvenes, de 18 y 21 años abandonaron a un bebé el Tultitlán, en el Estado de México. Las imágenes se hicieron virales gracias a que una cámara de seguridad grabó el momento en el que el adolescente sacó una bolsa de plástico de su mochila y la abandonó frente a un coche. Esta desafortunada situación pone en tela de juicio la escasa educación sexual que ambos recibieron, ya que, al verse ante un contexto de precariedad económica, decidieron abandonar una vida en lugar de buscarle un hogar. Esto se puede evitar si se les brinda apoyo e información a las juventudes sobre su sexualidad. 

La educación sexual es un derecho. Todas y todos los jóvenes merecen poder explorar y conocer su propia sexualidad en un entorno seguro, sin que les sea castigados o cuestionados. Brindarles un espacio para poder resolver todas sus dudas es clave para su autoestima, su salud y una vida sin decisiones basadas en el arrepentimiento o la culpa. 

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